Diseño Humano

GENERADOR

Alrededor del 36% de las personas se identifican como Generadores

Los Generadores son el motor que impulsa la energía y el poder de nuestro mundo. Dotados con una capacidad única para resistir y persistir, su Centro Sacral es la fuente de su extraordinario poder. Este centro despliega la energía vital que necesitamos para vivir, actuar, crear y, también, para amar, pues es el corazón de nuestra sexualidad y la garantía de nuestra supervivencia.

Los Generadores Puros son individuos que mantienen su Centro Sacral en constante actividad, sin embargo, carecen de conexión con el Centro de la Garganta, esencial para la expresión y manifestación humanas.

Desde pequeños, se nos enseña que la acción es la clave. A menudo, se cree erróneamente que constantemente debemos estar en movimiento, actuando según el lema de “Just Do It”. Podemos pensar que somos Manifestadores, que podemos hacer lo que queramos, cuando queramos. Pero eso no es verdad para la mayoría de la humanidad.

Para los Generadores, la lección más valiosa es aprender a responder desde su centro. Sí, tienen energía, una energía que puede realizar muchas cosas, pero ¿estarán dispuestos a esperar el indicador correcto que surge del mundo? Si pueden, su vida se despojará de frustraciones y se llenará de una profunda satisfacción. Al responder a lo que la vida les ofrece desde su centro, la existencia se convierte en un viaje de alegría y satisfacción.

Muchas veces, los Generadores inician acciones por temor a que nada sucederá si no actúan. Este es el lazo que los atrapa. Pero si el Generador tiene el coraje de esperar, pronto descubrirá que ese temor no tiene fundamento.

La rica fuente de energía vital que los Generadores albergan en su Centro Sacral actúa como un poderoso imán que atrae oportunidades gracias a su aura encantadora. Esta gran reserva energética es codiciada por muchos y, por ello, no pasarán demasiado tiempo antes de que varias personas soliciten acceso a ella.

Cuando un Generador espera a que la vida se muestre, se convierte en un imán que atrae todo a su alrededor. Todo llegará a su tiempo, no necesitan forzar acciones o tratar de que las cosas ocurran. Todo lo que está diseñado para ellos, todo lo que es correcto, se les presentará automáticamente. Empleo, relaciones, buena fortuna, todo.

Los Generadores están diseñados para fluir con el «ahora» de la vida, respondiendo a las indicaciones para actuar a medida que aparecen. Los Generadores no están aquí para preocuparse por el futuro. Su futuro correcto vendrá automáticamente si responden correctamente al «ahora» que la vida les está presentando.

Los Generadores, gracias a su abundante fuente de energía vital, están aquí para dominar la vida. Su propósito es convertirse en maestros del compromiso correcto, a través de su capacidad para responder a lo que la vida les presenta.

Un indicador de que un Generador está respondiendo y operando correctamente es la sincronicidad. Comienzan a tener experiencias que parecen suceder espontáneamente, dando la impresión de ser extremadamente «afortunados».

Es posible que algunos Generadores, que han vivido sin ninguna conexión con su Centro Sacral, hayan conseguido tener una vida exitosa, pero rara vez estarán felices y satisfechos.

A menudo, los Generadores se encuentran atrapados en proyectos que no los satisfacen o no les aportan una sensación de realización. Lo hacen simplemente porque parece que alguien tiene que hacerlo y ellos son los que tienen la energía. Por supuesto, esto lleva a una profunda frustración al sentir que están al servicio de otros, entregando su energía y poder a quien lo solicite.

La tarea más importante para un Generador es decidir a qué y a quién va a comprometerse. Es crucial que los Generadores sepan desde el comienzo de una actividad si van a comprometerse o no, ya que una vez comprometidos, cambiar de dirección implicará un enorme gasto de energía, frustración e inconveniencia.

El Centro Sacral es fundamental para un Generador, y su estrategia para vivir correctamente proviene de cómo este centro está diseñado para funcionar de manera óptima. El Centro Sacral solo puede responder con un «sí» o un «no» en cada momento. Si no utiliza palabras para compartir esta respuesta, emitirá un sonido interno en el área del estómago. Estos sonidos, similares a gruñidos, permiten al Generador tomar decisiones correctas en su vida cuando se interpretan como un «sí» o un «no».

El desafío de un Generador es comenzar a prestar atención a estos sonidos guturales y darse cuenta de que son su mecanismo de respuesta. La estrategia de un Generador para vivir su vida es esperar para responder.

Algunos Generadores pueden confundirse con la idea de «esperar», pero cuando estás despierto y consciente de lo que ocurre a tu alrededor, esperar simplemente significa que estás escuchando tu respuesta sacra antes de actuar.

Para todos los Generadores, esta es la clave para cambiar sus vidas de manera que vivan exactamente como deben ser, sin malgastar el poder precioso de su Centro Sacral.

Cuando un Generador encuentra su respuesta sacra, pueden obtener el «sí» y el «no» necesarios para avanzar en la vida. Esta respuesta puede presentarse en forma de un «mhm», o quizás solo sea un sentir, una sensación de energía o languidez. Un Generador debe estar muy atento a su respuesta sacra y necesita tiempo para escuchar. La respuesta puede no llegar de inmediato.

Todos los Generadores llegan a un punto en el que se sienten estancados. Sienten una barrera y a veces, dan media vuelta. Pero si has respondido correctamente, es importante que sigas adelante para llegar al siguiente nivel. Es casi como una prueba, para que tengas la oportunidad de preguntarle a tu Centro Sacral si esto es realmente lo que quiere. Superar esa barrera te garantizará que estás en el camino correcto.

Los Generadores son los trabajadores, por lo que pueden convertirse en esclavos si no escuchan a su Centro Sacral. Un Manifestador siempre iniciará y esperará que un Generador haga el trabajo. Un Proyector tratará de aprovechar el poder de un Generador de la misma manera.

Por tanto, los Generadores deben recordar consultar con su Centro Sacral antes de hacer algo que un Manifestador, Proyector o cualquier otro tipo energético sugiera. Deben estar alerta y conscientes, en lugar de vivir en «piloto automático». Por eso se considera que un Generador puede convertirse fácilmente en un esclavo. De manera inconsciente, termina entregando su energía a todos los demás en lugar de escuchar su sabiduría interna: su Centro Sacral.

La mayoría de los Generadores están viviendo una vida repetitiva, llena de rutinas laborales, tratando de subsistir día a día. Debajo de todo, hay una frustración y un descontento dentro de ellos y la sensación de que están aquí para otro propósito.

Todo lo que un Generador necesita hacer es responder correctamente y su propósito lo encontrará.

 

GENERADOR MANIFESTANTE

Alrededor del 32% de las personas se identifican como Generadores Manifestantes. La esencia de este tipo de personalidad es similar a la de los Generadores puros, ya que ambos se rigen por el mismo principio genético y energético. Este principio se centra en el Centro Sacro, una especie de centro de energía que nos guía en cómo interactuar con la vida.

La paciencia y la capacidad de responder a los acontecimientos a medida que se presentan son claves para un Generador Manifestante. Cuando actúan de esta manera, la vida se convierte en una experiencia única y rica. No intentan controlar o dirigir su vida mediante decisiones racionales, sino que confían en que la vida tiene un plan para ellos, un plan que se desplegará en el momento adecuado.

La diferencia entre un Generador y un Generador Manifestante es que estos últimos tienden a iniciar acciones rápidamente después de responder a un estímulo, a menos que sean del tipo emocional. Son personas con una fuente de energía pura, ubicada en su Centro Sacro, que les permite generar acciones y crear cosas. También es el origen de nuestra sexualidad y garantiza la continuación de nuestra especie.

El verdadero desafío para los Generadores es aprender a escuchar su interior y responder a la vida desde ese lugar. A pesar de su capacidad para realizar muchas acciones y tareas, deben esperar a recibir la señal correcta del mundo. Al hacerlo, eliminan la frustración y experimentan una profunda satisfacción.

La tendencia de los Generadores a actuar rápidamente a menudo se debe al miedo de que no suceda nada si no lo hacen. Este miedo es una trampa que puede llevar a una vida llena de insatisfacción. Pero si tienen el valor de esperar, pronto descubren que este miedo es infundado. La fuente inagotable de energía vital en su Centro Sacro es como un potente imán que atrae oportunidades.

La estrategia correcta para un Generador es fluir con el presente, respondiendo a las señales que la vida les ofrece. No necesitan preocuparse por el futuro, ya que este llegará si responden adecuadamente al presente. Una forma de saber si están actuando correctamente es prestando atención a las sincronicidades en su vida, lo que puede hacerles parecer «afortunados».

Los Generadores que no se han conectado con su Centro Sacral pueden tener vidas exitosas, pero rara vez se sentirán satisfechos. Muchas veces se encuentran comprometidos con tareas o proyectos que no les interesan o que no les dan una sensación de logro. Por eso, es esencial para todo Generador saber con quién y con qué se compromete, y escuchar su Centro Sacral antes de actuar.

El Centro Sacral es el núcleo de su poder y debe ser consultado antes de emprender cualquier acción. Los Generadores deben ser conscientes de su energía y utilizarla sabiamente, en lugar de cederla a los demás de forma inconsciente. Al hacerlo, pueden transformar su vida y vivir de una manera que les permita ser verdaderamente ellos mismos.

En última instancia, los Generadores deben recordar que su propósito en la vida los encontrará si responden correctamente a los estímulos de la vida. Al hacerlo, dejarán de vivir en modo automático y empezarán a vivir una vida llena de significado y satisfacción.

En un pasado no tan lejano, los Proyectores solían ocupar la última fila en el teatro del poder y liderazgo. A pesar de su sabiduría, no eran prioridad en una época donde el poder físico de los Manifestadores dominaba la escena. Los Proyectores, por su diseño, parecían desentonar en esa sinfonía.

Hoy, los Proyectores, que representan el 22% de la humanidad, han ascendido al escenario central del poder. Se erigen como faros de guía para los seres energéticos (Manifestadores, Generadores y Generadores Manifestantes), dirigiéndolos hacia un uso más eficiente de su energía.

Los Proyectores poseen un don innato para entender a los demás, siendo maestros en el arte de percibir y gestionar la energía de manera eficiente. Al tener sus Centros abiertos, son capaces de integrar y decodificar la energía de los demás. Con el tiempo, su habilidad para interpretar y organizar la energía les otorga la sabiduría para orientar a otros en el uso óptimo de su energía, talentos y dones.

Además, los Proyectores son excelentes a la hora de organizar a las personas y establecer conexiones. Tienen la habilidad de reunir a las personas adecuadas para completar una tarea específica, manteniendo al mismo tiempo la armonía en su entorno.

Por todas estas razones, los Proyectores son líderes ideales, administradores y guías en la era democrática moderna en que vivimos. Poseen una habilidad inata para detectar el potencial y los talentos de las personas, orientándolas de manera efectiva. Nuestro mundo requiere una diversidad de guías, y el colectivo de los Proyectores refleja precisamente eso. Cuentan con la mayor variedad de centros de Autoridad Interna de todos los tipos de seres humanos. Puedes encontrar Proyectores Emocionales, Proyectores con el Centro Bazo como Autoridad Interna, Proyectores Autoproyectados, Proyectores Mentales, Proyectores Proyectadores del Ego. Como grupo, están preparados para leer y guiar a cada variación de tipo energético.

El Proyector es el tipo de ser humano percibido como más «cercano». Esto se debe a la naturaleza de su aura, nuestra firma electromagnética personal que rodea a cada uno de nosotros de manera única. Nuestra aura se extiende hasta tres metros alrededor de la circunferencia de nuestro cuerpo, permitiéndonos leer e interpretar las auras de los demás. ¿Sabes esa «intuición» que sientes al conocer a alguien por primera vez, si te agradan o no? Esa es tu aura, enviando señales a todos tus sentidos.

En efecto, es la naturaleza única del aura de un Proyector lo que les da su nombre. Su aura se «proyecta» hacia los demás y, a su vez, es «proyectada» por otras personas. ¡En resumen, los Proyectores están aquí para ser vistos!

La atención del aura de un Proyector se centra intensamente en las otras personas que conoce, dirigiéndose a una persona

Representando un 9% de la población mundial, los Manifestadores son seres auténticos que destacan por su singularidad y su inusual manera de percibir el mundo. Parecen tener una conexión con una fuerza inaudita, que surge de manera inesperada y misteriosa. Esta inusual energía puede ser, a veces, intimidante tanto para ellos mismos como para quienes les rodean.

Los Manifestadores sienten la imperante necesidad de tener el timón de sus propias vidas, detestan ser dirigidos o tutelados por otros. Necesitan grandes dosis de autonomía para modelar su destino siguiendo su propio ritmo y reglas. No están aquí para ser simples espectadores, sino para tomar la iniciativa e influir en su entorno.

La niñez de muchos Manifestadores suele estar marcada por limitaciones impuestas por figuras de autoridad que, creyendo tratar con niños problemáticos, intentan ponerle freno a su ímpetu con estrictas normas y limitaciones físicas. Esta estrategia de contención, aunque bien intencionada, resulta perjudicial para estos niños, quienes ya llevan en su interior un claro sentido de lo que desean y cuándo quieren realizarlo. La imposición de limitaciones extremas puede tener graves consecuencias en su desarrollo emocional.

Algunos Manifestadores pueden desarrollar comportamientos evasivos en la adultez, buscando agradar a todos para evitar confrontaciones, mientras que otros pueden llegar a mostrar altos niveles de enojo y rechazo, derivados de las restricciones experimentadas en su infancia. Pero ni la complacencia ni la rebeldía representan una vía saludable para ellos.

Estos individuos tienen una sensibilidad y perspicacia natural que florece cuando se les permite ser auténticos. Son curiosos por naturaleza y únicos en su habilidad para tomar la iniciativa de forma espontánea. No necesitan esperar, pueden actuar por sí mismos, y es bueno que lo hagan, aunque esto no sería saludable para el 91% restante de la población.

Para navegar en un mundo donde la desconfianza puede ser su mayor obstáculo, los Manifestadores necesitan una estrategia. Según el Diseño Humano, dicha estrategia es «informar a los demás antes de actuar». Pero ¡ojo!, informar no significa pedir permiso, una acción que repudian, sino simplemente comunicar sus intenciones. Una frase útil podría ser “Solo te estoy avisando”. Esto permite que los demás sepan qué esperar, minimizando conflictos y malentendidos.

Aunque los Manifestadores siguen teniendo la habilidad para tomar la iniciativa, ya no son los únicos líderes y hacedores del mundo. Ahora, los Proyectores, los Generadores y los Reflectores también desempeñan roles importantes en la sociedad. Sin embargo, los Manifestadores siguen siendo fundamentales para dar inicio a grandes proyectos, aunque luego deben pasar el testigo a aquellos con la energía y la persistencia para llevarlos a término.

El futuro de los Manifestadores se ve prometedor. En un mundo globalizado e interconectado, su capacidad de tomar decisiones rápidamente y trabajar de manera autónoma se vuelve invaluable. No se dejen engañar, los Manifestadores siguen teniendo un rol crucial en nuestro mundo. Aunque ya no sean los líderes absolutos, su potencial para impactar y dar forma al mundo sigue intacto. ¡Nunca duden de su valor y de su lugar en este mundo complejo y en constante cambio!

Los Reflectores, esos seres únicos y maravillosos, representan apenas el 1% de la humanidad y funcionan de una manera radicalmente diferente al resto del 99%. Al nacer, no cuentan con ningún centro activado en su estructura interna, todos sus centros son un lienzo en blanco. Esto podría crear la impresión de que son espejos de la energía y las emociones ajenas, sin contar con un patrón consistente dentro de sí mismos.

En otro tipo de ser humano, esta sería la realidad, ya que un centro abierto e inactivo usualmente es influenciado por las personas a su alrededor. Sin embargo, los Reflectores son distintos gracias a su aura electromagnética, ese campo energético que nos rodea y actúa como nuestra tarjeta de presentación ante el mundo. Todos la tenemos y se extiende hasta tres metros a nuestro alrededor, permitiéndonos leer e interpretar las auras de otros.

El aura de un Reflector es particularmente resistente y tiene dos características sobresalientes. Primero, «degusta» las auras a su alrededor, tomando solo una fracción de lo que percibe. Segundo, actúa como un espejo, reflejando la energía que recibe. Este escudo de aura funciona como un mecanismo de protección, evitando que los Reflectores se vean abrumados por las energías y emociones de quienes los rodean.

Esta cualidad también hace que los Reflectores parezcan camaleones, capaces de fundirse con cualquier entorno, lo que a veces puede hacerlos pasar desapercibidos. Al interactuar con un Reflector, las personas suelen ver reflejos de sí mismas, por lo que un Reflector debe ser muy consciente de su entorno y de con quién se relaciona. Si interactúan con personas positivas, reflejarán esa positividad. Si, por el contrario, tratan con personas negativas, también reflejarán esas características.

Al vivir en una «burbuja» áurica, los Reflectores a menudo tienen dificultades para establecer conexiones profundas, lo que puede complicar sus relaciones personales. Sin embargo, es fundamental que pasen tiempo entendiendo quiénes son y qué están reflejando. Este autoconocimiento requiere tiempo y práctica.

Una característica definitoria de los Reflectores es su sensibilidad a los movimientos planetarios. Mientras que las demás personas solo perciben un susurro de los efectos de los planetas en tránsito, los Reflectores lo experimentan de manera completa y profunda. Se cree que están aquí para mostrarnos la influencia constante del cosmos en la vida humana.

Cuando se trata de tomar decisiones, los Reflectores carecen de un centro confiable en su interior para guiarlos. Pero tienen una relación especial con la Luna. Siguen un ritmo lunar único, y se les aconseja esperar un ciclo lunar completo, o 28 días, antes de tomar decisiones importantes. Esto puede ser un desafío, pero es crucial para su bienestar.

Además, es útil para un Reflector estar al tanto de los tránsitos planetarios y cómo afectarán su día a día. Aprendiendo de los patrones astrales, pueden predecir sus niveles de energía y optimizar su productividad. Aunque es importante recordar que estos tránsitos no definen quiénes son, solo son reflejados por ellos.

Las decisiones más importantes que un Reflector debe tomar correctamente son dónde vivir, con quién vivir, dónde trabajar y con quién trabajar. Como reflejos de su entorno, si viven en una comunidad comprensiva y alentadora, florecerán. Si no, pueden sentirse desilusionados.

Cuando un Reflector logra entender y dominar su diseño humano, tiene la oportunidad de convertirse en uno de los seres más sabios y objetivos entre nosotros.

Si se encuentra definida, se convierte en la autoridad primordial. Antes de tomar una decisión, es importante esperar. El lema de este principio es «no existe la verdad en el instante, la verdad emerge a través del tiempo».

Si está definida y el Plexo Solar no, entonces uno debe atender a las respuestas instintivas de «sí», «no», o «no sé». Esta respuesta surge sin titubeos. Si hay alguna duda, entonces, la respuesta es «no», o «no sé».

Si está definida y tanto el Plexo Solar como el Sacral no lo están, es crucial prestar atención a la voz o intuición interna y proceder de acuerdo a ello, sin considerar los posibles resultados. Esta voz es muy sutil y no se repite, así que tienes una sola oportunidad de seguir su consejo.

Si está definida y ni el Bazo, ni el Sacral, ni el Plexo Solar lo están, las personas deben orientarse por su propia voluntad. Necesitan enfocarse en sus deseos y preguntarse «¿Qué es lo que deseo? ¿Qué beneficio obtengo de ello?» Existen dos autoridades del Ego: Proyectada, que va del Ego al Centro G, presta atención a las frases que comienzan con «yo». Y Manifestada, que va del Ego a la Garganta, usan su voluntad personal para determinar qué manifestar.

Si está definida, y los otros centros de Autoridad no lo están, entonces la persona debe guiar sus acciones en base a lo que le produce felicidad. La pregunta principal es «¿Esto me hará feliz?» o «¿Me proporcionará satisfacción?». Necesitan dialogar su decisión con otros para comprender lo que ellas mismas están diciendo. Al hablarlo, sabrán qué hacer. Es importante escuchar lo que uno mismo dice.

Si no hay ningún centro definido bajo la Garganta, la guía se obtiene del entorno y hablando de la posible decisión. Deben tener en cuenta que si están en un entorno «incorrecto», están con las personas «incorrectas». Deben prestar atención a lo que están diciendo.

Las personas que pertenecen a esta categoría son Reflectores, sin ningún centro definido. Deben tener asesores de confianza y discutir su situación o posible decisión, mientras esperan el ciclo completo de la Luna. Consiguen claridad al escucharse hablar acerca de su posible decisión.

Los colores en tus centros energéticos representan las partes de ti que son ACTIVAS, las que pueden hacer cosas y tomar acción. Aquí es donde muestras al mundo cómo ves, percibes y piensas. No eres influenciado por el exterior, sino que tú eres quien influye en los demás.

Las zonas en blanco representan tu parte RECEPTIVA, la que está abierta y recibe, siente y capta todo lo que ocurre en el exterior. Aquí puedes ser influenciado por el exterior. Eres como una esponja que absorbe lo que recibes del exterior. Pero también aquí puedes adquirir sabiduría al reconocer lo correcto y lo incorrecto en la forma de actuar de los demás. En los espacios vacíos está tu capacidad para sorprenderte, para dejarte asombrar, la intuición, la capacidad para vivir de forma flexible, abierta y espontánea.

El Gráfico del Diseño Humano cuenta con una composición de 36 Canales, todos con roles y propósitos singulares, los cuales tienen sus raíces en la erudición de la Cábala. Actúan como elementos de unión entre los Centros energéticos.

Los Canales que presentan una coloración – negra, roja o a rayas – se interpretan como definidos. Estos simbolizan el núcleo y la esencia más profundas de un individuo, y llevan un significado vital para su existencia.

La misión de vida más esencial y relevante está conectada con la identificación de nuestra esencia y su amplificación. Uno de los desafíos con respecto a los Canales en el diseño de una persona radica en que existen facetas que son inconscientes y, por tanto, difíciles de identificar, lo que impide su potenciación.

Las puertas, reflejadas en números dentro del Diseño Humano, se ubican en cada uno de los Centros de nuestra representación corporal. Son esenciales ya que representan los canales por los cuales fluye la energía en nuestra estructura de Diseño Humano.

Dichas puertas, suman un total de 64 y cada una de ellas tiene un vínculo con un Hexagrama del I-Ching. Son como los guardianes que regulan la entrada y salida de energía en nuestro mapa de Diseño Humano, su actividad se define por la posición de los planetas en el momento de nuestro nacimiento.

Si observas con detenimiento, puedes ver que hay 64 números, o puertas, que envuelven el Mapa Corporal, formando un círculo. Son la segunda circunferencia exterior que rodea el Mapa Corporal.

Las puertas coloreadas indican la posición de algún planeta en el momento de tu nacimiento (tu personalidad) y la posición 88 días antes de tu nacimiento (tu diseño).

Cuando observas tu Mapa Corporal, notarás dos columnas con números: una roja (la parte inconsciente) a la izquierda, y otra negra (la parte consciente) a la derecha.

Estos números representan las puertas activas en tu diseño, que se reflejan en el Mapa Corporal.

Son personas que disfrutan de aprender experimentando. No temen a los riesgos y encuentran seguridad en su constante búsqueda de conocimientos.

Estos individuos tienen un talento especial que disfrutan desarrollando en soledad. Sin embargo, saben que las oportunidades llegan a través de sus relaciones con los demás.

Son personas muy reservadas que valoran su intimidad. Ellos eligen cuidadosamente en qué y con quién se involucran.

Este perfil se caracteriza por ser resiliente y práctico. Descubren lo que funciona y lo que no a través de sus propias experiencias, y comparten sus hallazgos con los demás.

Son personas que han vivido diversas experiencias a través de un proceso de prueba y error. Estas experiencias les convierten en figuras de referencia para otros.

Este perfil representa a aquellos que son apasionados en lo que hacen. Son más efectivos cuando tienen una base sólida y siguen su camino elegido.

Son personas amigables que atraen oportunidades. Comparten sus conocimientos y experiencias con su red de contactos y se convierten en ejemplos a seguir.

Son líderes natos que utilizan sus habilidades investigativas para aportar soluciones prácticas a los problemas del mundo.

Estos son los genios entre nosotros, que prefieren trabajar en privado hasta que están listos para compartir sus talentos con el mundo.

Estas personas necesitan pasar por una fase de aprendizaje a través de la experiencia antes de convertirse en ejemplos inspiradores para los demás.

Son personas resilientes y optimistas que, a través de sus experiencias personales, llegan a convertirse en modelos a seguir. Su sentido del humor y objetividad son su marca registrada.